En cuanto a la forma de gobierno del valle de Valdaliga ,este se basaba en Las Juntas Generales que se celebraban tanto para aceptar o elegir alcalde y juez y nombramiento de los demás oficiales de justicia, como para tratar de los impuestos reales, leva de soldados, nombramiento de Alcaldes de Hermandad, abastos y consumos, o acuerdo de recaudación entre vecinos para hacer frente a necesidades publicas. Estas juntas se celebraban “desde tiempo inmemorial” en el lugar de la Pereda de Vallines.Respecto a los Alcaldes de Hermandad, existieron en Valdáliga desde la edad Media hasta fines del Antiguo Régimen. Las Hermandades habían surgido en la Edad Media como acción espontánea de los concejos en época de crisis del poder político, uniéndose a veces a estas hermandades algunos nobles, con el fin de defender sus derechos y libertades y de oponerse por sus propios medios a los desafueros, violencias y arbitrariedades.En Valdaliga, tal como ocurría en Álava y Guipúzcoa, las Juntas Generales elegían un Alcalde de Hermandad con jurisdicción criminal para juzgar determinados delitos mediante procedimiento sumario y, asimismo, unos Comisarios que fiscalizaban la actuación de estos alcaldes con facultad para destituirlos y sancionarlos. En 1476 los Reyes Católicos decretaron se constituyese la Santa Hermandad para el mantenimiento del orden publico.
Los tres alcaldes de hermandad que se dice existían en Valdaliga constituían una milicia rural para la represión del bandolerismo en despoblado y eran nombrados del modo siguiente: uno por los concejos de Roíz y Labarces, otro por el concejo de Treceno, y otro más por los concejos de Lamadrid, La Revilla, el Tejo y Caviedes.Una de estas Juntas Generales corresponde al 18 de febrero de 1585 y a ella asistieron los vecinos y regidores de Treceño, Roíz, Labarces, Caviedes, El Tejo y La Revilla planteando la necesidad de arreglar el camino del Turujal, necesario “ansi para ir a Castilla como para venir de Castilla a esta tierra”.Otra de estas juntas Generales tenia lugar el 3 de mayo de dicho año siendo de nuevo las comunicaciones la razón de esta convocatoria, justamente el repartimiento que se había hecho para arreglar el puente de Santa Lucia y de San Vicente de la Barquera, para lo cual se hacia recaer una importante contribución a los vecinos del valle de Valdaliga.Hasta nosotros ha llegado el acta de la Junta General del Valle de Valdaliga celebrada en Vallines el 25 de abril de 1687 en la que los vecinos se oponen a recibir por Corregidor a don Francisco García de Labarces, a la sazón Alcalde de la Santa Hermandad ese año por los concejos de Roíz y Labarces, pues había sido nombrado por tal Corregidor o juez del Valle por el conde de Escalante. Tal nombramiento y aceptación se rechaza por el valle en razón a que el nombrado era natural de el, cuando conforme a derecho el Corregidor debía ser de fuera de cinco leguas en contorno del valle; Porque no podían aceptar tal nombramiento hasta que no se resolviese el pleito que contra el Conde de Escalante seguían en la real Chancillería por cuestión de señorío y jurisdicción. Se votó y el resultado fue de 112 votos a favor de rechazar dicho nombramiento y 87 a favor de aceptarle.Había dos tipos de juntas generales, las denominadas “ Ayuntamientos Generales” que eran verdaderas asambleas multitudinarias a las que acudían todos los vecinos varones del valle, y los “Ayuntamientos Particulares “a los que acudían únicamente los regidores y procuradores de los concejos (estos regidores eran elegidos por cada concejo, un procurador y un regidor para cada uno, 14 en total, y al igual que los Alcaldes de hermandad, por un año) . En ambos casos tales reuniones eran presididas por el alcalde o juez ordinario del valle. La frecuencia con que se reunían, por ejemplo en el año 1713 fue de dos a tres veces por mes, todas ellas celebradas en Vallines a excepción de una en Roíz y otra en Lamadrid siendo los temas tratados la provisión de papel sellado, pago de impuestos reales, caza de lobos, pacificación y “quietud” del valle, provisión de vino, repartimiento de maravedíes, comunicación de Reales Ordenes, bagajes y suministros para soldados, ordenanzas, pesos y medidas y abastecimiento del valle.Al mismo tiempo que se realizaban estas Juntas del valle, cada uno de los concejos – Roíz, Labarces, Treceño, Caviedes, Lamadrid etc.- reunían a sus vecinos en concejos generales y concejos abiertos, tal se constata a través de un documento que se conserva entre los Protocolos Notariales correspondiente al 19 de septiembre de 1593 referente a un concejo abierto de la villa de Treceño.Además de la familia es en la comunidad en la que el individuo alcanza su razón de ser social. Es en el concejo, en la asamblea vecinal, donde el individuo ejerce la democracia directa para tratar de la ordenación de las actividades de interés común ya fuera en el orden económico ya en el social.El pensamiento religioso lo informaba todo en la vida de las gentes de Valdaliga en los siglos XVI a XVIII; las ordenanzas de los concejos se hacían “al servicio de Dios” y para que no se “quebranten las leyes divinas”.Cada concejo además se regulaba por unas ordenanzas, de las cuales ,solo han llegado hasta nosotros, tres de ellas de los pueblos de Roíz, Treceño,y Caviedes que a su vez son copia de otras mas antiguas, pero que solían ser similares en todos los concejos.Las ordenanzas de los concejos, como cuerpo normativo de autogobierno de la comunidad, constituyen asimismo un elemento mas , junto al religioso y otros de orden económico, de cohesión social; estableciendo normas de solidaridad obligatoria como dar terreno del común al vecino que no lo tuviera para hacer un huerto” para que cada vecino tenga este alimento tan preciso y necesario para el gasto de su casa y familia” y la obligación de los vecinos de ayudar a reconstruir la casa de aquel que por cualquier accidente se le quemase y si se quemase una casa, tocada la campana , todos debían acudir al fuego bajo pena de 600 maravedíes y si la casa se destruyese totalmente “ deberán los vecinos juntos y unánimes a cortar , labrar y tirar las maderas para reedificarla hasta ponerla en cruz y de ripia en la forma y modo que estaba antes de quemarse”.Así mismo la regulación de los pastos, la obligación de reunirse los vecinos para elegir el toro de concejo, La obligación así mismo de reunirse en concejo en la casa de la escuela después de misa sin excusa alguna, la prohibición de cortar árboles , concretamente robles, y la obligación de plantar dos por cada árbol que se cortase con licencia, mostrando una manifiesta preocupación por el aprovechamiento de los montes de una forma sostenible ( verdadero ejemplo para la sociedad actual) la obligación de componer los caminos por los propios vecinos, la costumbre antigua de cerrar las dehesas (así como el cerrar las entradas al pueblo desde las mieses con portillas, en Labarces todavía existen los túmulos de piedras que servían para fijar las portillas , las había en cada entrada al pueblo desde la mies , seguramente para evitar que el ganado que se llevaba a beber en los varios abrevaderos que había en el casco del pueblo se escapase a campo abierto) o por ejemplo que a los que caían enfermos deberían asistirlos dos cada noche hasta que se aliviaran, y la precisa obligación de asistir al entierro. Los concejos, tal como se constata claramente a través del catastro de Ensenada de 1753, además, dedicaban dinero de sus fondos para la luminaria del Santísimo (Roíz, La Revilla), para misas votivas y rogativas (Lamadrid, Labarces, Roíz) y para fiestas religiosas como el Corpus (Lamadrid, Roíz), incluso para repara la iglesia del lugar como es el caso de Treceño.
Horno exterior ( hay alguno mas pero en el interior de las viviendas
Desde la Edad media Valdaliga fue proveedora de madera para la construcción de navíos para la real Armada, habiendo constancia documental de cómo a mediados del siglo XVIII se estaban explotando los montes con destino a las reales fabricas de Lierganes y la Cavada, estando prohibida la corta a los vecinos. La agricultura era de subsistencia. En 1753 las tierras producían maíz, alubia y trigo (este en pequeña cantidad), además de alguna cantidad de vino. En los huertos se sembraban hortalizas y verduras y se registra la existencia en casi todos los pueblos de colmenas y de árboles frutales tales como castaños, manzanos limoneros, perales y nogales. La producción media que se declaraba en 1753 era de 16 celemines de maíz (cuatro fanegas castellanas) y uno de alubias por cada 8 carros de tierra La circulación de moneda era baja y tanto las familias como los concejos se veían obligados a endeudarse en años de escasez. A mediados del siglo XVIII todos los concejos están endeudados teniendo que hacer frente al pago de los réditos de los créditos solicitados para poder seguir pleitos contra otros concejos del valle en razón de derechos de pastos y para litigar contra el conde de Escalante.En cuanto a la ganadería en 1599 contaba el valle con 1066 cabezas de vacuno solo superado en las Asturias de Santillana por la Abadía de Santillana y por el valle de Cabezón, pero con mayor cabaña que los valles limítrofes como Cabuérniga (924 cabezas), o Val de San Vicente (568). Por la insuficiencia de los terrenos de pasto, los concejos se veían obligados a establecer convenios para el aprovechamiento común de ciertos términos destinados a pastos. El incumplimiento por las partes de dichas contratas daría lugar a numerosos pleitos desde la edad Media. Así, hay constancia documental de pleitos habidos entre Labarces y la villa de San Vicente de la Barquera en los siglos XV y XVI; en 1614 y de nuevo en 1627 pleitean los concejos de Roíz y Caviedes, en 1642 Labarces contra Lamadrid y en 1681 El Tejo contra La Revilla, siendo frecuentísimos tales pleitos llegando incluso los concejos a endeudarse para proseguirlos. Por otro lado la falta de pastos obligaba también el pastoreo trashumante periódico. Los concejos de Valdaliga tenían “desde tiempo inmemorial” derechos de pastos (mediante contratas) en Campoo, Cabuérniga y Polaciones.Pero dejando a un lado la propiedad publica o concejil el resto del territorio estaba y aun lo esta, dividido en pequeñas propiedades o minifundios y en algunos casos llegando al microfundismo.En la actualidad el abandono de la ganadería es indiscutible y si alguna consecuencia positiva tiene, es que los bosques autóctonos intentan colonizar otra vez lo que fue suyo un día, y que en un país como el nuestro que entre los incendios y la deforestación nos están convirtiendo en la antesala del Sahara, no deja de ser un motivo de esperanza .Lo malo es que se da la paradoja de que las mieses privadas se están convirtiendo en monte bajo y en cambio los terrenos comunales que deberían estar a bosque, están sirviendo de pastizales .Según el catastro de Ensenada (1753) en Labarces había 82 casas habitables (recogiendo la cifra de 61 vecinos), mas 30 establos y 6 invernales, dos molinos (uno de los cuales se encontraba en el Berrellin en el rió Pindal, y el otro en el rió Panes, del primero apenas quedan los restos de una pequeña presa y alguna pared)(Aunque en distintas épocas hubo molinos también en la Mata y mas tarde en Bustillo) 15 pies de colmenas, un escribano, un herrero, un cantero, un carpintero y un sastre. Y según el censo de Floridablanca de 1787 la población de Labarces era de 333 habitantes.La norma era el matrimonio concertado por las familias, estableciendo las condiciones económicas mediante “escritura dotal”, que fijaba lo que una y otra parte se comprometían a cumplir y darse a la hora del matrimonio. Sin embargo, tras haberse realizado los esponsales, este a veces, no llegaba a realizarse a causa del incumplimiento de las condiciones por alguna de las partes de lo establecido en la escritura dotal, tal es el caso, por ejemplo, que observamos en Labarces en 1640 donde un joven se niega a casarse (aun teniendo a la novia preñada) mientras no se le entregase la dote estipulada.
La población de Valdaliga desde los siglos XVI a XVIII presenta un estancamiento demográfico motivado entre otras razones por la fuerte emigración. Tal estancamiento solo parece romperse a lo largo del siglo XIX hasta el 1950 en que alcazo el máximo de población 3832 individuos de hecho y 4063 de derecho. Desde 1950 hasta la actualidad Valdaliga presenta un comportamiento demográfico regresivo.Si bien esto en la actualidad no tiene mucha explicación, Valdaliga no se encuentra perdido en los picos de Europa si no que se encuentra en el litoral, tiene playa (La de Oyambre) y al mismo tiempo montañas (Sierra del Escudo, Sierra de Arnero, Lleno etc.) con rincones realmente bellos y para colmo le atraviesa por la mitad la autovia del cantábrico con lo que esta bastante bien comunicada, pero algo falla, no se crean las posibilidades de crear puestos de trabajo en la zona y ello hace que no se fije población, los que vienen de fuera compran las casas ( que los vecinos venden para trasladarse a Cabezón o Torrelavega donde tienen los trabajos y servicios mas a mano) pero como segunda o tercera vivienda porque como sitio para descansar de los ajetreos de las ciudades es ideal) lo cual no palia el despoblamiento en gran parte del ayuntamiento,( en la actualidad el barrio mas poblado de Labarces se encuentra en Cabezón de la Sal). Los municipios vecinos presentan un mayor dinamismo, con la creación de pequeños polígonos industriales, turismo rural etc., ejemplo que se debería seguir sin tener que recurrir siempre a abusar de la construcción y el ladrillo como único medio de progreso, pues en exceso ,como ya sucede en otros lugares, acabaría por destrozar los hermosos parajes de que aun disfrutamos.
Una ayuda importante seria la continuación del proyecto del Sopláo con la terminación de la carretera de acceso por el pueblo, desde el barrio de la Florida hasta el Hoyo el Agua , y la construcción del proyectado museo de mineralogía y del ámbar , que podría complementarse con rutas guiadas a pie por los hermosos parajes que rodean la cueva : el Pico Hugón ( con las vistas sobre Celis y el valle del Nansa) , la llanada del monte Lleno( con una gran vista de la costa cantabra y astur) y La Gándara y la cumbre de la sierra del Escudo .
Pues tanta belleza hay en la superficie como bajo la tierra en el territorio Soplao
A mediados del siglo XVIII Treceño se había convertido en una gran villa con 179 vecinos (debemos recordar que en esa misma fecha Torrelavega solo contaba con 88) si bien desde el siglo XVI venia siendo el centro neurálgico del valle, debido a sus salinas, su importante ferreria y sobre todo por ser la residencia de los Guevara que controlaban el Valle.Como válvula de escape al desequilibrio existente entre población y recursos la practica común de los hombres de Valdaliga a lo largo de los siglos XVI al XX fue el elegir el camino de la emigración, siendo los destinos preferentes el Nuevo Mundo y Andalucía.. A partir del siglo XVI la nomina de los hombre de Valdaliga que salieron para Indias es impresionante, alcanzando a miembros de todas las familias, incluso de aquellas mas pudientes, y esto no solo por el minifundismo, sino también porque las formas de transmisión de la propiedad concebidas para que no se desmembrase el patrimonio familiar dejaba los bienes vinculados al hijo mayor, sin que pudieran partirse o venderse.Natural de Labarces fue don Manuel Gil casado con doña Ramona de Cossío, natural de México, que fue Cónsul de México en Málaga. También del pueblo era don Francisco del Castillo de quien en 1668 se dice que había muerto en indias, habiendo fundado una capellanía en la parroquia de San Julián de Labarces.En Treceño había nacido en 1638 don Esteban Vélez de Escalante, quien en 1665 partió para México donde continuaba como capitán en 1691, fecha en la que ingreso como Caballero de la orden de Santiago, donde fue Alcalde ordinario de la villa de Sombrerete, y caso con Francisca García Román, hija de Juan García Román, natural de Labarces, también en indias. De Labarces era también Alfonso González de Linares, casado con Antonia Gutiérrez de la Helguera, el cual se encontraba en indias en 1794. La emigración a América continuaría hasta el siglo XX .Algunos de aquellos hombres pertenecían a familias que tenían allí a alguno de sus miembros, bien al padre, al tío, al hermano o algún otro familiar. Muchos de ellos murieron allí sin hacer fortuna. Otros desempeñaron, tal como hemos visto, importantes cargos, desde inquisidores y alcaldes, a capitanes y comerciantes. Los más afortunados siempre se acordaron de su lugar de origen y enviaron dinero para sus familias y para construcción de obras pías, -escuelas y otras- en su pueblo natal.También se observa la salida de Valdaliga hacia la corte y otros lugares de la corona de Castilla de muchos de sus hijos. Natural de Labarces era don Joseph Blasco Orozco y Labarces, quien en 1730 era elegido, aun estando ausente, regidor del concejo por el estado de los hidalgos, y era hijo del “Yllustrísimo señor” don Blasco de Orozco y Labarces, del Consejo Real en la Real Cámara de Castilla, y a la sazón residente en la villa y corte de Madrid. De la casa de la Mata en Labarces fue el Capitán de infantería don José de la Mata y Cos.Igualmente salieron de Valdaliga infinidad de hombres hacia Andalucía. La lista es interminable, pero si podemos reseñar alguna referencia, como la que proporciona en 1813 don Julián Gómez de Merodio, natural de Labarces, casado con Maria González Cabanzon, quien nos habla de las razones de su emigración: “para suministrar a casa y familia”.
El Escorial
Aunque los tres personajes valdaligos que mas fama alcanzaron , fueron sin lugar a dudas: El genial arquitecto (orgullo del pueblo de Roíz ) (Juan de Herrera creador del Escorial y de un estilo arquitectónico singular el “ Herreriano” .
Juan de Herrera y Gutiérrez de la Vega, nació en Movellán, un barrio de Roiz en 1530. Es considerado uno de los arquitectos más importantes del renacimiento español, y fue uno de los personajes que acompañaron en 1548 a Felipe II en su viaje a Flandes, donde estudió arquitectura y ciencias exactas. Tras asistir al emperador Carlos V en su última época en el retiro monacal de Yuste, se incorporo como arquitecto mayor a la construcción del monasterio de San Lorenzo del Escorial a la muerte del autor de los planos, Juan Bautista de Toledo, quedando su dirección como obra principal y calificándose a su autor como creador de un estilo llamado herreriano.)
El ya nombrado Fray Antonio de Guevara escritor y cronista de Carlos V
(Fray Antonio de Guevara nació en Treceño entre 1475 y 1480, criándose en este lugar marchándose a los doce años a la corte real. Descendiente del linaje de los Guevara se incorporo al servicio de la reina Isabel la católica hasta la muerte del príncipe don Juan, en 1497, a consecuencia de la cual, probablemente abandono la vida cortesana y se retiro como religioso de la orden franciscana. Cronista de Carlos V, fue obispo de Guadix y de Mondoñedo, donde murió en 1545.en su obra política y literaria destaca El reloj de príncipes destinada al emperador con carácter didáctico y moral, Las epístolas familiares y el breve tratado titulado Menosprecio de corte y alabanza de aldea.)
Y el no tan conocido pero no menos importante Fray Silvestre Vélez de Escalante (también natural de Treceño como Fray Antonio de Guevara ) el cual con 27 años en 1776, emprende un trascendental viaje misionero acompañado de otro franciscano y media docena de soldados que en un espacio de 158 días fueron capaces de recorrer en territorio hostil 3000 Km., atravesando de norte a sur el estado de Colorado penetrando en el de Wyoming, caminando por el norte del estado de Utah, que atravesaron totalmente, describiendo al sur el Gran Cañón del Colorado, para regresar a Nuevo México. Resultado de aquella expedición fue una valiosísima descripción geográfica, antropológica y etnográfica, así como el trazado de mapas y rutas, recogiendo importantes aspectos sobre la orografía. Fue un precursor en la exploración colonizadora pues describió la orografía y geología del Gran Cañón del Colorado casi un siglo antes de que otros lo hicieran. De su proeza quedan testimonios toponímicos en “Villa de Escalante”, Desierto de Escalante, y ciudad de Escalante en el estado de Utah. La hazaña de este humilde franciscano de Valdaliga ha sido reconocida 220 años después por el gobierno de EE.UU.. . dedicando con su nombre un parque nacional de enormes proporciones al sur del dicho estado de Utah.
Escalante Park
A lo largo del siglo XIX hubo varios intentos de ubicar el ayuntamiento en distintos lugares del municipio, tanto en Treceño como en Roíz (Las Cuevas) o en Vallines e incluso un intento de formación de un nuevo ayuntamiento que con la denominación de “Ayuntamiento de Treceño” abarcase a los pueblos de Caviedes, El Tejo y Treceño, tal como lo intentaron entre 1820 y 1821 y tal como aparece diseñado en el “Estado de los Ayuntamientos” de 1822. Sin embargo, aquel intento nunca tendría plasmación real y en lo sucesivo seria el antiguo nombre del Valle de Valdaliga el que conservara su denominación y su ámbito territorial. Ahora bien, cierto es que la capitalidad del valle sufrió mudanzas a lo largo del siglo celebrándose los ayuntamientos tanto en Treceño como en Vallines o Roíz (donde al final quedaría establecida).
Ayuntamiento de Valdaliga
Si algo ha caracterizado a Valdaliga a lo largo de la historia, salvo este intento de escisión de 1820 para formar el ayuntamiento de Treceño, ha sido el ejemplo de unidad en la diversidad , cada concejo, sin perder su identidad y formas de gobierno propias se reunía ( enviando a sus regidores o acudiendo sus vecinos directamente a las juntas Generales del Valle) para discutir sobre los asuntos comunes con el resto de concejos, dando vida a una entidad superior mas amplia llamada primero Allega o Afleca y mas tarde Valdaliga.Como consecuencia del pleito de los nueve valles de las Asturias de Santillana se construyo en el lugar de Reocin una Casa de Juntas para albergar a los representantes de las jurisdicciones de la vieja Cantabria que, habiendo recuperado su condición de territorio del rey, se unieron en Juntas o Asambleas Generales, “en cuerpo de Provincia”, para resolver sus asuntos comunes.Aquel proceso tuvo como momento mas significativo el año 1779, en el que fueron aprobadas por el rey Carlos III las Ordenanzas de la Provincia de Cantabria, estando presente como diputado del Real Valle de Valdaliga José Rubin de Celis. A este personaje sucederían como diputados por Valdaliga en las Juntas de Puente San Miguel José S. Díaz de Lamadrid, Francisco Merodio y José Díaz Escandon.
Escudo de Valdaliga
Es innegable el importante papel que las Juntas de Puente San Miguel tuvieron, y entre sus distritos el valle de Valdaliga para lograr el reconocimiento de la personalidad territorial de Cantabria, obtenido primero a través de la figura de la Provincia Marítima, lograda mediante Real Orden de 22 de enero de 1801, y definitivamente a través del Real Decreto de 30 de noviembre de 1833, en que se creo la provincia de Santander.
A pesar de las viejas estructuras agrarias ancladas en el pasado se percibe a lo lago del XIX y XX un denodado esfuerzo público desde el ayuntamiento y concejos de Valdaliga por mejorar las vías de comunicación, condiciones educativas, así como otros servicios como fuentes públicas bebederos para el ganado o lavaderos público .
Bebederos y lavaderos en Villanueva y en la Villa Vieja
Labarces hace 40 años
Entre 1891-1899 se construye la escuela de Labarces (la antigua se encontraba adosada a la capilla del Endrinal, posteriormente se construyeron las actuales, la primera de piedra y después adosada a ella a un lado otra , para separar niños y niñas, y al otro lado un salón publico ambos de ladrillo, hoy en día tras concentrarse los estudios primarios en Treceño , una se ha dedicado a consultorio medico y sede de la junta vecinal, y la otra es la sede de la asociación “El Relámpago”); en 1901 se hace el nuevo cementerio en el sitio del Cagigon.
La Báscula
La Cova
Al año siguiente, se realiza la construcción de la carretera de tercer orden entre Labarces y San Vicente de la Barquera .Asimismo en 1901 tiene lugar en Valdaliga la explanación con motivo de la construcción del ferrocarril del cantábrico.
Hermoso tilo
El potro de Espina
La bolera
Pista polideportiva
En 1902 se prolonga el camino vecinal de las Cuevas hasta la pedriza y esta en construcción la carretera de Labarces a Treceño. En 1906 se repara el puente La Mata- Labarces.
José Luis